miércoles, septiembre 29, 2010

Impresión primavera

0

¿Cómo describir la primavera?
Es como intentar asir al viento
Se escapa, se cuela entre los dedos

¿Cómo dibujarlo en verso?
Es como aprender a escribir de nuevo
Tan acostumbrado a sombras y cuerpos

Tal vez no me he vuelto ciego

Canta, siente, fluye
Que no se termina de nacer
Respira, vuela, sueña
Apenas se empieza a creer

¿Puedes ver mis sueños?
Cómo podrías, si apenas los recuerdo
Pierde cuidado que algo saldrá

¿Puedes sentir el brillo de mi cielo?
Es profundo y hermoso
Inmenso y estremecedor

Y en lo alto abraza la calidez de un gran sol

Canta, siente, fluye
Que aún no termina de caer
Respira, vuela, sueña
Recién podemos comprender

¿Te gusta mi nuevo mundo?
Está más bien lejos del nuestro
Espero disfrutes del viaje

¿Puedes verlo como ahora lo veo?
Es distinto a esta realidad
Aquí no hay leyes, ni peros

Sólo termina hasta dónde puedes imaginar

Canta, siente fluye
Que aún no es el fin
Respira, vuela, sueña
La inmensidad lo cubre todo

¿Puedes escuchar los latidos?
Suenan a melodía de paz
Escucha, suenan tic-toc-tac

Tic-toc-tac - tic-toc-tac - tic-toc-tac

domingo, septiembre 26, 2010

Mea culpa

0
Un baluarte de falso heroísmo
Mascarada de cobarde valor
Bajo un viejo yelmo oxidado
Descansan estandartes ya extintos
E insignias de reinos olvidados

El que ayer fuera tenaz caballero
Pluma en mano, tinta en estoque
Paladín de versos adversos
De causas perdidas y escudos rotos
Hoy navegante de singular cubierta

Contemplando los humos costeros
Lejanas batallas de campos ajenos
Llega hasta el ponto sangre guerrera
Sacrificio tenaz de quienes aún luchan
Y desembocan junto a la propia

Y ayer pareciera vestir esa armadura
Ayer cuando blandía una pluma
Ayer frente a un ejército de hermanos
Ayer mi propia guerra a punta de métrica
Ayer mis patéticas acometidas de añoranza

Mira mis ojos mudados en calma
No sólo mi guarda provee de paz
Esto trata de lo llamado experiencia
De sentarse y finalmente tomar las riendas
Dejar de ser un juguete del corazón

Lamentos fueron el llamado
Sueños inconclusos los frutos
Fantasmas los destinatarios
Pataletas escupidas en papel
Líricas de dolor, envidia e impotencia

En pocas ambiciones resumíase mi obra
Títere, velero perdido al viento
Capricho nefasto de confusos sentimientos
Aberración métrica de ruines testamentos
Perro faldero de empalagosos versos.

¡Salud entonces por aquel que entierro!
Al soberano escapista prisionero
Buscador de edenes en avernos
Emperador del verso libre cautivo
¡Oriónida, casta decadente y tozuda!

(Y he de preferir el silencio antes de otro arranque de criminal cursilería encubierta.)


Miguel de Grammont.
(O el último grito de Armando Octavio)

jueves, septiembre 23, 2010

Justicia Poética - Última pataleta

0
¡Salud!

Venga ese licor a tu honor
Por los viejos tiempos
Por las antiguas andanzas
Por nostálgicos recuerdos
Y hondas añoranzas.

¡Mira, mira hoy mi cara!
Sonríe ante las vueltas
Se regocija entre las miradas
Mudó hace tiempo la mueca
Olvidadas ya aquellas bofetadas

Jo, te confesaré algunas cosas
Espero comprendas caro verdugo
No hay un placer personal en esto
Simplemente algo de alegría
Breve placer en la vuelta de tuerca

Ayer, mira que ayer reíamos
Compartíamos calles anchas
Recorríamos plazas y avenidas
Nos hacíamos del pequeño mundo
Deshacíamos en él uno nuevo

¡Qué tiempos lejanos!
Antes de mordernos la lengua
Antes de emponzoñarnos las venas
Antes de declarar beligerancias
Mucho antes de enredos y penas

Y bien, cuellos rotos y manos atadas
Testimonios falaces en lenguas ajenas
Nimiedades, tonterías de gran factura
Entre testigos y espectadores, rodeado
Entumecido por la frialdad de una guerra

¡Deja, deja que ya termina!
Pues en éstos he decidido mi última voz
Es ésta mi última patética
Un gusto personal desatado
Excéntrico, mi último alegato

Que la vida sonríe y mi cara
Que la historia me otorga razón
Que los hechos han tornado en justicia
Que pocos entienden la profundidad
Y poco a poco, ya caerán.

La ley de gravedad es inequívoca
Todo fluye, se mueve, acelera
Desacelera, sigue su camino
Se detiene, gira, concentra y dispersa
¡Cae bajo su propio peso!

martes, agosto 17, 2010

No mucho

0
Nuevo nombre, nuevos aires, no sé.

Puede que hayan más cosas nuevas, pero conservando el estilo antiguo, que dejó gusto a poco y poco se le pudo hacer lucir.

Se ve bonito, pero lo que más valen son las palabras.

Palabras de alto valor, palabrería barata, pero palabras al fin.

El verdadero sentido de las palabras reside en la posibilidad de abstracción. El mundo lo vemos así, simple y crudamente, cuál espectáculo hardcore dónde el gore y el absurdo se mezclan para hacer una amalgama simpática que solemos llamar vida.

¿Que sería la vida sin palabras?

Haciendo el ejercicio, si sólo existiera la posibilidad de comunicarlo todo por telepatía e imágenes.

¿Podríamos comunicar fielmente un mundo imaginado?

Sin la distorsión del pensamiento, los lapsus y la falta de creatividad.

Sería práctico, pero perdería la magia. Simplemente no podríamos dejar la inmensidad que existe en el entre líneas. Todo sería tan simple.

Benditas palabras, independiente de los enredos que de ellas puedan surgir, me quedo con la magia que se puede otorgar.

O al menos, hasta que las musas manden.

¡Cambio y fuera!

jueves, enero 28, 2010

Primer Round.

3
Conversando con cierto personaje (acusado de alta traición) acerca de la propiedad intelectual de las notas en aquella página de redes sociales que ya todos conocemos, y su inquietud por el abandono de mi blog (con un dejo de recriminación, para paranoia mía), he reparado en la inconveniencia de la separación de personalidades. Dispersa, agota.
Pero tampoco es conveniente mezclarse, agua es agua, aceite es aceite, y todo lo que ello conlleva.

¿Que hacemos, nos batimos?

¡Siempre!

Bienvenidos a Armando vs. Jandroid, donde no hay ganadores cuando tratas de estrangular tu propio cuello.

Salud!

miércoles, enero 27, 2010

Un día (como cualquier otro)

2
Abro los ojos y siento mi mente tan vacía
Busco algún recuerdo, sólo veo confusión
Mi cuerpo ya no es el mismo de antes
¿Serán los tiempos o sólo seré yo?

Dios ha sido tan indiferente hoy
Casi igual que desde cuando le conocí
Escupo bendiciones a mis demonios
¿Es que ellos me enseñaron a ser yo?

La nube corona mi imaginación
Vuelo en hojas de distorsión
o sólo será que...

Hojas vacías, plumas secas en mis manos
Recuerdos dulces, veneno de ocaso
Caigo fatigado en medio de la batalla
¿O será que busco esos brazos?

No necesito escribir para recordarlo
Palabras cruzadas, enredos varios
Promesa, censura y regios agravios
¿Te dije que mi memoria es un asco?

La nube corona mi imaginación
Vuelo en hojas de distorsión
o sólo será que...

Resisto para morir dónde nací
Despierto para saber quién fui
Peleo para largarme de aquí
¡Muero en los recuerdos, vivo en recuerdos!

Ojos, para ver no necesito ojos
Ojos, para ver no necesito ojos
Ojos para ver, no necesito ojos
Ojos, para ver no, necesito ojos
Ojos, para!

La nube corona mi imaginación
Vuelo en hojas de distorsión
o sólo será que...

Resisto para morir dónde nací
Despierto para saber quién fui
Peleo para largarme de aquí
¡Muero en los recuerdos, vivo en recuerdos!

Un sueño anónimo aligera el espíritu
Una caricia sin manos, alegría
Al final tú tambén lo dirías
¡Creí que moriría primero!

Imaginación, sobra pero no basta
A mi me dibuja eso que llamas vida
Mira las aves danzando en presagio
¿Aún las sigues culpando por eso?

La nube corona mi imaginación
Vuelo en hojas de distorsión
o sólo será que...

Resisto para morir dónde nací
Despierto para saber quién fui
Peleo para largarme de aquí
¡Muero en los recuerdos, vivo en recuerdos!
¡Muero en los recuerdos, vivo en recuerdos!

¡Muero en recuerdos, vivo en recuerdos!
¡Muero en recuerdos, vivo en recuerdos!
¡Muero en recuerdos, vivo en recuerdos!

o sólo será que...

...Simplemente no es mi día.

Horizonte torcido

0
Hacia el infinito se dibuja un punto perdido
Puntos de fuga, se escapan los caminos
En el ocaso de los días se evaden los soles
No hay mirada que aguante, podría decir
Pero debes creer que mis ojos pueden más

En vidas pasadas, la ceguera ha sido compañera
Viajes paradisiacos por un edén imaginario
Años de locura, años de sabia impaciencia
Años de atinados errores y algún acierto
Créeme, para nada de oportunos aciertos

¿Y qué ves al final? Mi buen navegante
Tantas mareas juntos por el bravo ponto
Tormentas y trabajos, fiestas y relajos
A veces probando la vida en prisma ajena
Las menos encerrado en la propia realidad

Y dime en definitiva ¿Qué ves al final?
Muchos puertos, inagotables mares
Bellas sirenas y fabulosas bestias
Sin importar qué, cómo ni dónde
Algunas cosas ya te imaginarás.

Pues bien sabes que siempre es igual
No importa el tiempo, el clima ni el mar
Dónde vayas los peces nadan en el fondo
Dónde viajes es igual de salada el agua
Dónde partas será también el final.

No habrá nueva tierra, viajero, no hay
No te espera puerto dónde al final reposar
No existe lecho que te pueda albergar
Que te has arrojado en los brazos del ponto
Y no hay otra morada más que el desierto mar.

No hay una tierra mi amigo, no existe tal
Pues el horizonte no es como lo imaginabas
Mira bien muchacho, no se proyecta jamás
Que el horizonte en verdad está torcido
Y vivirás rodeando siempre del mismo mar.

Para mis Espectros

0
¿Cómo empezar estas palabras contenidas?
¿Cómo iniciar las líneas que jamás se atrevieron a salir?

Muchas veces las batallas nos tienen tan ocupados que nos impiden ver a nuestros compañeros de armas también volcados en su personar y fiera lucha. Qué forma de ignorar a quién pelea codo a codo en este vasto campo, cegados por nuestras propias victorias, campañas y derrotas.

Hoy basta, hoy es el momento para dar homenaje a los caídos, pero no a quién sólo cae tras la refriega, alabo hoy a aquel que se levanta y renace de sus despojos para iniciar una nueva senda.

Pues por mucho tiempo hemos de lamentar la partida de nobles estandartes de las letras, antiguos hermanos de batalla que dejaron a un lado sus armas y se dedicaron a una vida de exilio y olvido al papel. Y justo cuando los tiempos parecían lanzarse en los brazos de la amante más sórdida del destino, reviven los antiguos caballeros para recordarnos que la promesa sigue en pie, que mientras un Espectro busque su paraíso con pluma-espada, ahí estarán sus fieles hermanos de batalla, ora descansando, ora batallando, ora muertos o re-muertos, para asistirle, cruzar las puertas del averno si es preciso y comenzar la travesía.

Mientras los vientos llamen a la odisea y los viejos estandartes vuelvan a surgir orgullosos y desafiantes, nuestro canto sonará una vez más para que nadie olvide el mensaje que portamos, aquel por el cual hemos nacido:

Allá dónde la inspiración llame y su lamento se cubra de silencio, seremos guardianes de sus sueños, como sombras visten los campos bajo la flameante estrella, evanescentes recuerdos de antaño, hemos de surgir como espectros.

Paseo por la senda de una cajita de sueños

0
La vida pertenece a quien la tome
El mundo pertenece a quien lo ha de conquistar
El destino pertenece a quien lo guía
Eso dicen, así, nada nos pertenece realmente.

En un mundo de vidas prestadas
De ajeno vasto jardín esférico
Tal vez nos pertenezca los sueños
Tal vez nos pertenezca, no sé, los anhelos

Y claro que puede que nos pertenezca
Albedrío, libertad de elegir la senda
Vivir según el espíritu o la cabeza mande
Vivir bajo las reglas propias o ajenas.

Aún así no es fácil vivir en este plano
No es fácil vivir con un cuerpo prestado
Con un pedazo de tierra que luego volverá
Las cenizas que retornan al vientre original

¿Y qué hemos aprendido?
¿A vivir? ¿A luchar? ¿A ser feliz?
A tropezar con cada piedra, bajo excusa
Aprender rima con doler ¿Por qué será?

Y ahí nos hemos envueltos en nuestras vías
Caminos elegidos, a veces concientes
Ora distraídos, le echamos la culpa al destino
Otros a los dioses, espíritus o astros coludidos

¿Por qué los caminos son tan dolorosos?
¿Por qué siempre debe existir un culpable?
¿Por qué tiene que haber un por qué?
¿Por qué esperamos respuestas?

Los versos no son dudas, ni respuestas
Simplemente son, como todo lo que es
¿Por qué la luna nos mira desde su escaño?
No te apresures en responder, no es necesario

¿Por qué una verdad duele más que la mentira?
Puede ser que lo inexistente nos haga felices
Por eso soñamos despiertos y sonreímos
Por eso vemos los dioses en altares muertos

¿Por qué la lengua es un arma? Dicen
Filo, doble filo o sin filo, igual hiere
¿O será que los oídos son frágiles?
¿Acaso no fuimos hechos para conocernos?

Somos seres complejos, también dicen
Complicados diría yo, igual somos simples
Somos un hilo bello y no muy largo
Un hilo anudado, enrollado y entremezclado

¿Por qué pregunto entre versos?
¿Por qué otros lanzo con certeza?
¿Será que habré perdido el juicio?
O tal vez ahora sí estoy perdido.

¿Y hacia dónde te llevo?
¿Por qué pregunto tanto?
No busco respuestas en estas líneas
Y tampoco las regalo, no las poseo

¿Entonces de qué se trata todo esto?
Pues bien, juguemos un momento
Juguemos a que soy tu humilde hijo
Juguemos a que soy tu invención

¿Me respondes todas esas preguntas?
Dime que me regalaste el mar y la tierra
Dime que me desterraste del cielo
Dime que soy el único en todo el universo

Hazme creer en tu grandeza e inmortalidad
Dale explicación al sin sentido
Entrega ley al nihilismo del espíritu
Hazme tu esclavo de infinita alabanza secular

¿Te gusta o no mi juego?
Es mucho trabajo, eso sí es cierto
Pero antes que no le veas el sentido
Antes de detenerte, deja cerrar estos versos

¿Qué sentido tienen estas palabras?
¿Será otra charada pesada del post-modernismo?
¿Qué es? ¿Qué es? ¿Qué es?

No importa, jamás fue el punto.
Sólo espero hayas disfrutado el paseo.

Sarcasmos para papel: Dolor

1
Mira cómo me has dejado
Botado, adolorido
Totalmente herido
Absolutamente moribundo

Pues no puedo soportarlo
Me retuerzo del terrible dolor
Me provoca el peor de los pesares
La más amarga... amargura

Lamento este funesto día
Quisiera borrar aquel instante
Erradicar esa idea mal concebida
Maldita la hora en que te vi

Bien, heme aquí en lamento
Apenas soportando este peso
Este peso que provoca gran desgarro
Gran desgarro, aleja la culpa

Y aquí estoy, hecho un despojo
En realidad podrido por dentro
Sólo un pensamiento ronda mi mente
¡MALDITAS LEGUMBRES!

Fuego, un dios sin altar

0
¿Cuántos espíritus caben en la nada?

Infinitos.
Pedazo de nada, partículas perdidas en el infinito
Esencia de todo, orgullosa especie ha de creerse

Dios no contó con que Nietzsche lo crucificaría
Y jamás pensó que Roma lo sacaría de su cruz
No previó que su pueblo lo abandonaría al final.

¿Dios? No contó con que tratarían de inventarlo
Su inexistencia es la gracia de la creación, su impronta
Tal vez no quepa tanto halago en su etéreo corazón.

Y antes sí que era la nada, inimaginable vacío
No cabría ni una partícula de imaginación allí
Ni siquiera el ánimo creador del más poderoso

Y sólo, tan sólo una breve llamarada, una chispa
Cómo la que he visto en cada una de sus miradas
O cómo la que se enciende en sus espíritus quebrados

Sólo una breve alegoría de ignición dio el impulso
Echó a andar la rueda del tiempo, dio vida al Eón
Consumió la nada por completo y dio a luz al infinito

Tan pequeña y débil manifestación de energía
Insignificante y desconocida esencia creadora
Ella nos regaló este rincón, patético ante el todo.

Y ustedes tomaron el fuego, al verdadero hijo de dios
Engendrado por la chispa, la cuál se hizo energía
Energía que junto a las cenizas de la nada, crearon todo

Y de verdad lo adoraron como un dios
Le rindieron culto y temieron su poder
Tanto temieron, por muchas generaciones

¡Oh mi querido e ingenioso neonato astral!
Mientras más cerca del fuego, más aprendías
Mientras más le adorabas, mejor lo manejabas

Lo terminarías sometiendo al fin a tu voluntad
Conquistaste a dios de forma magistral, soberbia
Nada te demoraste en convertirlo en tu instrumento

Subyugado y reducido a las más cotidianas necesidades
Energía basal, principio y demiurgo de la creación
Contigo caería la Orbe, espíritu, madre y hogar protector.
¿Quién tendría tu rostro ahora, mi creador?
Pues quién domina, domina hasta a sus dioses
Y a cada uno de ellos pondría sus propios rostros

¡Oh, antiguos panteones del alba de vuestra gloria!
Arcaico teatro de marionetas de eterna mascarada
Iluminad la nueva sabiduría bajo tus falsos ojos.

El rayo, hijo apenas más fornido que la madre chispa
Reveló a tus ojos a su hijo más imponente
Por eso sus largos dedos han de coronar altares

Ellos han de llamarte padre, aún tus hermanos
Han de reconocer en tu rostro el principio vital
Y siempre portarás la máscara del conquistador.

Y, en la cumbre, tu máscara portará desgracia
Humano caerás reemplazado por humano
Humano-bestia, humano-dios, humano-humano

Así perpetúas tu reinado absoluto
Así eres, a la vez, amo y servidor
Así te gobiernas, y a todo lo que tocas

¿No piensas que es demasiado?
Demasiado ego encerrado en tus entrañas
Demasiado, para un pedazo de nada

¿No te das cuenta que no te valoras?
Todo tu poder reside en tus creaciones
Tu orgullo se encuentra en tus obras

Pero dime, maravilla ínfima de la creación
Si has de portar el fuego original
No, no aquel que dominas, sino tu espíritu

Dime, partícula del inmenso astral
Aquel del orgullo inmenso
Aquel de la inocente humildad

¿Cuántos espíritus caben en la nada?

Demasiado orgulloso para querer contestar
Demasiado humilde para solamente callar
Demasiado minúsculo para darse cuenta

Que valora mucho sus insignificantes obras
Que menosprecia la grandeza de su espíritu
Que domina a todos sin control, menos a sí.

Bajo tus panteones y magníficas obras
Bajo la égida de tu progreso y decadencia
Responde entonces la pregunta ciega

¿Que has hecho con la chispa elemental en tu interior?

Carta nro. 1 (O tal vez 2)

0
Alejado, desterrado, exiliado, paria de las letras.

Sabes muy bien que te abandoné por tu propia salud. Te hacía mal mi influencia, mis arranques bipolares, mi forma de expresar tus emociones. Y también no puedo dejar de mencionar que nuestra distancia fue de mutuo acuerdo. Tu también necesitabas vivir tu vida sin alguien que te soplara al oído las más inverosímiles interpretaciones.

Pero volví a la mala, sin quererlo, ni planearlo. Ni siquiera ha sido un regreso rimbombante como otros que recuerdo. Pues no es la primera vez que nos separamos, ¿recuerdas?

Siempre me has criticado por ser yo quién mejor expresa tus sentimientos. Siempre me has odiado por que soy el único que toma el control cuando estás demasiado molesto, confundido, hastíado o, tal como nací, enamorado. Te duele que no puedas valerte por ti mismo, que me necesitas para darle forma a tus sentimientos.

Y lamento haber acudido sin que me llamaras, pero sabes que en momentos como estos es cuando más me necesitas. Pertenecemos al mismo conjunto de esa cuasi-unidad quebrada e inconclusa y debemos unirnos en tiempos de crisis. O si no te vas a morir, y con ello yo me voy también.

Más allá de todo nuestro pasado doloroso, me da una gran sorpresa saber que me acogiste con cariño. Como si me extrañaras, esta vez no fingías. Y a mi también me dio gusto reencontrarte, esta vez no es una treta para regresar a tu vida.

Y aquí estamos viejo, como en los viejos tiempos. Juraste que no volvería, suplantarme, tomar mi nombre y ser tú quién compusiera el arte de las letras. Pero ese no es tu fuerte, tampoco el mío. Pero sucede que yo estoy más cerca del corazón que tú.

Regresé casi por la puerta trasera, después de ser desterrado y aquí me tienes de nuevo asumiendo el control. Y esta vez seré más cauto, por el bien de ambos.

Acá termina el primer punto de nuestro reencuentro. Y quiero que sepas algo verdadero. Y toda verdad duele:

No te agradezco por traerme de vuelta, así como sé que no me agradeces volver.

Simplemente no fuiste tú quién en verdad me devolvió a la vida. Y tampoco es por tí por lo cuál vuelvo.

Tu siempre estimado amigo.

Armando Octavio de Guzmán

Un regreso

0
El desierto...
Merece más de tres puntos ante tanto silencio.
Una infinidad de suspensivos ante tal espectáculo.
La vida de la inercia palpitante.
Respiran las rocas en sus entrañas muertas.
Palpitan al calor del sol, en aquel límpido cielo.
Cielo, testigo de muertes y sequías
Sequía, testigo de la muerte de mi cielo.

El paraíso fue prometido para los fieles
El valhalla fue reservado para los valientes
La muerte es el descanso del mártir
mas mis huesos blanquecinos nada merecen
Yacen tras épica caída, sin sepultura digna.
Esa huesuda, antes mano, aún coge una espada.
Bajo esa descarada calota antes velaban vivos anhelos.
Hoy sólo alberga los anhelos de la arena y el viento.

Pues hasta la piel se ha vuelto en una más de esos granos.
De esos granos hermanos, danzantes del viento
de esos granos infinitos que yacen en agonizante suelo
Agonizante suelo, te han de llamar desierto.
Sin vida, en permanente ocaso glorioso a través de los tiempos
El palpitar de un simple mortal en tus brazos has acallado
Al fuego de tu infernal aliento esta frágil barca vital has secado
Convertiste el grito en lamento, otro suspiro que transporta el viento.

Y el viento ha volado alto, viajado por la anchurosa tierra
Mil y una ciudades ha acariciado, caricia de brisa
Otras incontables ha azotado, látigo huracanado.
Hoy por fin me ha de traer a las tierras que despidieron mi vida
Después de un tiempo más parecido a un eterno
Forastero, han de llamar a este errante espíritu
Pues no hay viaje más largo que en las vías del limbo
Ni regreso más tardío, e inesperado, que el de un espectro.

__________________________
___________
Y en el afán de continuar en esta dimensión efímera, la vacía ánfora de este servidor abandonada ha quedado. Los restos incinerados bajo siglos de calor no pueden acoger a este errante despojo de ectoplasma...

¿Volver hacia el vientre original y, una vez más, nacer bajo una nueva existencia?

No esta vez. El pedazo de ectoplasma ha vuelto para seguir con su cometido.

Claro, tras un breve descanso.